La respiración en las plantas
La respiración es el proceso inverso al de la fotosíntesis, en donde, a
partir de sustancias orgánicas y oxígeno, los vegetales obtienen energía y
liberan CO2 y agua. Todos los órganos de la planta respiran para obtener energía.
La
respiración se realiza a través de los estomas que se encuentran en las hojas
.La respiración ocurre continuamente sobre todo en las hojas y en los tallos
verdes.
Las plantas necesitan tomar oxígeno del aire y dióxido de carbono,
sin embargo no tienen órganos adaptados para esta función, como los animales,
ellas respiran por sus órganos que son: la raíz, el tallo, las hojas y sus
flores.
La raíz, por ser el órgano de la planta encargado de la absorción de
agua y nutrientes, está en constante crecimiento y necesita proveerse
directamente de oxígeno para respirar. El tallo respira por medio de sus poros,
llamados lenticelas. El
fruto se caracteriza por la respiración anaeróbica, es decir, que no requiere
oxígeno. Esta particular forma de respiración libera sustancias que son las
responsables del aroma de las frutas maduras.
Al proceso de
respiración también se le llama intercambio de gases porque se produce un cambio
entre el medio y la planta. Los gases que se intercambian son: vapor de
agua, dióxido de carbono y oxígeno.
Este proceso tiene como fin obtener energía
para que la planta realice sus funciones vitales.
No hay que
confundir el intercambio de gases con la verdadera respiración que es la respiración
celular.
En la fotosíntesis
también realiza un intercambio de gases, la planta toma dióxido de carbono
y expulsa oxígeno.
La transpiración y la respiración de las plantas
La
transpiración elimina el exceso de agua en forma de vapor o de gotitas que
salen de la planta, en especial de las hojas. La transpiración
es un proceso por el que el agua obtenida de las raíces hasta pequeños poroso
estomas que se encuentran en a la cara inferior de las hojas, donde
se transforma en vapor de agua y se libera al medio en el que se
encuentra la planta. Disponen de un mecanismo que les permite abrirse o cerrarse,
de acuerdo con el volumen de agua que la planta necesite eliminar en forma de
vapor. Por los estomas también ingresa el CO2 utilizado en la
fotosíntesis.
La transpiración o perdida de agua es regulada de muchas
formas son :
• Reducción o
desaparición de las hojas, como en los cactos, en los que las hojas se han
transformado en espinas.
• En algunas
plantas se presenta una eliminación activa del agua a través de ranuras
especiales en el borde de las hojas.
• Pérdida temporal
de las hojas es muy común en regiones de sequías prolongadas.
La
transpiración que realizan los vegetales es cuantitativamente importante en el ciclo
del agua. El agua de lluvia vuelve a la atmósfera a través de la evaporación
del suelo y de la transpiración de las plantas, principalmente. De estos
mecanismos, el segundo es tres veces mayor que el primero.
De
todos modos, más allá de esas formas periféricas de respiración, lo cierto es
que la planta cumple esta función sobre todo a través de los estomas de las
hojas, a un ritmo que varía según diversos factores. La velocidad de
respiración de un vegetal es diferente según su edad y los factores climáticos.
Cuanto más joven sea la planta, más activa será su respiración, pues su
necesidad de abastecerse de energía es permanente.